El Partido Acción Nacional terminó a finales de diciembre de 2012 su proceso de refrendo de militancia. Los panistas tenían que hacer explícito su deseo de continuar dentro, salvo excepciones como lo establecen sus Estatutos (consejeros nacionales y estatales que lo hayan sido por más de 20 años), así como los miembros activos con más de 30 años de militancia.
El refrendo es un parteaguas. Con poco más de 368 mil militantes, el PAN regresó a tener casi el tamaño de 1999 (358 mil panistas). Atravesó el espejo de su propia composición, convirtiéndose en el reflejo inverso de sí mismo: pasó de ser un partido de adherentes (81 por ciento), a uno de activos (56 por ciento). El PAN que se formó cuando encabezó la Presidencia de la República (2000-2012) prácticamente se desvaneció.